Nobleza en Humildad
Maljut: es la cualidad emocional de la nobleza y el liderazgo.
Hod: es de la empatía y el reconocimiento.
Medita sobre los actos que en ti se manifiesten con nobleza, cuando percibes los sentimientos y necesidades del prójimo.
Cuando has reconocido la particularidad del otro…
¿Cómo te sientes?
¿Disfrutas con la sensación, y te sientes elevado junto a él?
O, por el contrario: ¿te sientes disminuido y con una sensación de pobreza personal?
¿Te ennoblece el contacto con el prójimo, o te sientes humillado?
¿Has considerado como le resulta al otro la relación contigo?
El que realmente es comprensivo y empático - una vez reconocidas sus capacidades-, no teme señalar las dificultades; pero también sabe resaltar los aciertos ajenos.
Busca lo negativo para transformarlo en positivo, en lugar de regodearse con el error y/o mal ajeno.
Cuando se detiene en el obstáculo del prójimo, es para ayudarlo a sobrepasarlo, con la finalidad de ennoblecerlo mientras se ennoblece así mismo; en lugar de rebajarse mientras ridiculiza al otro.
Considera que es cierto el dicho: hasta el árbol más pequeño produce su sombra; por lo que insiste en iluminar cálidamente, incluso a aquellos que se apartan por considerarse estos, poco aptos o necesitados de recibir atenciones positivas.
Así pues; al ser una persona que tiende a la nobleza, es humilde en su constante búsqueda de la superación.
Si aprecias que tus acciones o palabras te denigran y humillan al otro; entonces debes saber que hay aquí un aspecto tuyo que debes trabajar con insistencia, hasta lograr mostrar a los demás, como la humildad y la modestia realzan la dignidad humana.
Shabat Shalom!
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